miércoles, 15 de diciembre de 2010

Mirar más allá

Unos meses después se acaba el cuatrimestre y tengo que hacer repaso de lo aprendido. Cada vez me va todo más deprisa y por ello debo mirar las cosas con mayor intensidad para ver qué hay detrás.

A lo largo de este año hemos analizado la huelga general, la situación de los españoles en la crisis, cómo referenciar en Internet, buscar en páginas de empleo, cómo situarnos en una entrevista y qué debemos hacer para prosperar en el mercado laboral.
Pero eso no es suficiente, aunque sí necesario. Hemos visto que en casi todos los casos de búsqueda de trabajo hay dos modelos de ofertas y puestos, aquellos para los que sirven todos y aquellos para los que sólo sirvo yo.

Puede que en los del primer grupo podamos entrar porque demos el perfil adecuado (cosas como no ir como vagabundos, no estar locos o no ser pesados por la candidatura), aunque en la mayoría de los casos es estar en el momento indicado y en el lugar indicado. Dicho de otra manera, gustarle al entrevistador. Esto es acertar en el gusto de aquel que tiene que decir sí o no. Así de sencillo y de subjetivo. Por muy técnico y laborioso que parezca al final acaba siendo un camino en la dirección que te marca el entrevistador, que raramente está relacionado con el puesto que vas a desarrollar.

Sin embargo, hay otro modelo de trabajo, y ése es el que sólo necesitas ser tú. Con esto me refiero a que te crees un nombre, des lugar a conversaciones sobre ti. Llegar a una entrevista de trabajo ya siendo conocido es uno de las mejores cosas que pueden ocurrir.

Por eso esta asignatura ha servido para darme cuenta una y otra vez que no sirve seguir los patrones de conducta a rajatabla ya que eso sólo te llevará a estar a la misma altura que el resto. Puede que eso sea cerca del nivel del mar y que te pesquen, pero sigo queriendo ser alguien que pueda salir del mar para que me atrapen con mucha mayor facilidad.



En definitiva, lo mejor es saber venderte y no parar jamás, en ninguno de los sentidos.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Encartado de conocerle

Ricardo Zoe Álvarez Escalante
Ptda. Peña las Águilas pol.1 nº 166
03296 Elche (Alicante)
Móvil: 678479418
E-mail: rzoealvarez@gmail.com


Elche, 9 de diciembre de 2010


Estimado Sr. Dominguez

Habiendo podido leer su oferta de empleo de redactor creativo para la empresa Grupo RH Asesores, le escribo para llamar su atención en cuanto a la vacante de dicho puesto.

Recientemente he concluido mis estudios de Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad de Alicante, por ello me pongo en contacto con usted, puesto que es mi deseo poder entrar a participar en un grupo tan importante como el suyo.

He colaborado en distintas empresas como diseñador gráfico y he podido realizar campañas en diversos ámbitos, ganando concursos en algunas de ellas. La oportunidad de trabajar en una consultora internacional como esta como redactor creativo me parece una gran oportunidad. Siempre ha sido mi sueño participar en un gran grupo empresarial que se preocupara por los demás y Grupo RH Asesores me parece el lugar idóneo.

Le adjunto mi currículum para que vea en datos mis logros conseguidos, aunque en ellos no se puede mostrar la persistencia y la creatividad que pongo en mis trabajos y que formarían parte de su empresa si pudiera formar parte de la misma.

Si lo considera oportuno, me encantaría poder entablar una conversación cara a cara en algún tipo de encuentro. Quedo a su disposición para la respuesta.

Un cordial saludo



Ricardo Zoe Álvarez Escalante

jueves, 2 de diciembre de 2010

Me enredo, me enredo

Soy un defensor de la privacidad. Por ello considero que las redes sociales son un embudo para hacernos tragar mucho y a la vez un escaparate para ser vistos. El problema está en cuando no quieres ser visto y sólo quieres comunicarte. El sueño del voyeur se ha hecho realidad y se puede ver fotos, videos y demás cosas privadas con suma facilidad.

Mi iniciación en las redes sociales fue casi por obligación. Un mundo que te empuja a estar conectado y a gritar “yo estoy aquí”. Tuenti, Facebook, Youtube y los ya casi extintos MySpace y Fotolog, han formado parte de mi vida en un momento u otro. Sin embargo los considero a todos ellos innecesarios. Por el momento.

Suelo escuchar con mucha frecuencia “la fuerza de las redes sociales es imparable y puede hacerte llegar a cualquier sitio”. Sí, es cierto, pero también puede hacerte más daño que ninguna otra cosa antes si no se controla bien. He aquí el quid de la cuestión, saber controlar las redes sociales o ser controladas por ellas.

Agencias, marcas, empresas en general, rastrean la red no para sacar beneficio, sino para encontrar errores. Una de las razones de contratar o no a algún candidato está en su perfil de las redes sociales. Cómo se divierte, cuales son sus intereses, sus aficiones… Es un menú de degustación para expertos en recursos humanos. Pueden empacharse de errores con los que decidir no contratar. Y es que la gente no sabe diferenciar entre la vida y la vida social. Han abierto todos sus diarios personales por la mitad y los han expuesto a la luz para que todos los vean. Por tanto ¿se debe mentir en tú diario? Sí, definitivamente.

Si tu vida es una imagen usa Photoshop en ella. Sigue a profesionales de tu sector en el Twitter, hazte fan de las empresas a la que optas en Facebook, borra todas las fotos comprometidas del Tuenti… En conclusión, crea la imagen de ti que quisieras que todos vieran.



jueves, 25 de noviembre de 2010

¡Qué bonito es todo cuando se endulza!

Visto que ninguno de mis compañeros está por la labor de criticar, aquí vengo yo para hacerlo.
El pasado viernes 19 de noviembre estuvo con nosotros el encargado de RR.HH. para la Fnac de Alicante Manuel Pérez Gil. Con él pudimos relajarnos y escuchar ejemplos del tan temido momento de la entrevista de trabajo contado desde su punto de vista. Pudimos notar que él no parecía un lobo feroz que atacara a los novatos a la hora de seleccionar y que ayudaría en lo que pudiera en la entrevista. Dijo que puede saber por la manera de comportarse, si hay ansiedad o por su forma de vestir, si se va a ser contratado al momento. Algo que hace que hasta los pequeños detalles cuenten.
Sin embargo me hizo una gracia cruel el hecho de que repitiera como si se lo hubieran grabado a fuego que cuando no eligen es porque simplemente “no cumplimos el perfil”. Ese escudarse tras una frase para no decir lo que realmente se piensa es muy del perfil de las corporaciones. “Cómo decir frases sin parecer que los has dicho” podría ser el título de un libro de entrevistadores. Muchos de ellos psicólogos que encuentran en las empresas un hueco laboral con el que discernir que es válido y quien no.
Está claro que para una empresa no querrán a alguien agresivo u obsceno, pero a ellos les darían la misma frase que a alguien que no supiera manejar Excel a la perfección si es ese uno de los requisitos. Por eso me cabrea ese maquinismo seleccionador que distingue entre dos opciones un 0 y un 1.
“Todos tenemos que pasar por el aro” dirán algunos. Pero yo creo que el aro no debe ser así. El problema es que de una manera o de otra, todo el mundo acaba encontrando trabajo y resignándose, o resignándose a no encontrarlo, pero en algún momento se deja de luchar y se acepta lo que viene dado. Eso no lo soporto. ¿Cuál será la diferencia entre mi candidatura y la de alguien que sí escojan? Es más, si me cogieran, ¿cuál sería esa misma razón pero conmigo en el otro lado? Sólo importa pasar el examen y da igual el esfuerzo que haga falta por conseguirlo, ¿no?

jueves, 18 de noviembre de 2010

Perfecto, ya le llamaremos. ¡SIGUIENTE!

Los tópicos son algo que me hacen mucha gracia. Son la sabiduría popular. Cosas que se deben dar por hechas por toda la humanidad pero que algún conocido se decide a contarte como si fueran la panacea. Por eso cuando me dicen que debo ir “bien vestido” a las entrevistas de trabajo, o no cortar al entrevistador cuando está hablando o no decir tacos ni hablar de manera prepotente me hecho a reír internamente.
Supongo que todos tenemos miedo a las entrevistas. Si os fijáis en los concursos en los que hay audiciones de canto, de baile o de habilidades, la frase más utilizada es “es que estoy nervioso”. El nerviosismo puede llegar a paralizar a una persona, pero hay que saber jugar con ello.
Mi caso es el de alguien que todavía no ha hecho ninguna entrevista de trabajo, pero estoy confiado que aunque no surgiera elegido, sabría plantar cara a la situación y hacer que el entrevistador lo tuviera difícil a la hora de descartarme. Porque esa es la verdadera realidad, si buscan a alguien concreto, estadísticamente hay muchas más probabilidades de que ese alguien no seas tú.
Tengo un hermano que ha pasado por los dos lados de la mesa de seleccionar. Estuvo mandando solicitudes de empleo a grandes empresas y llegó a tener que pasar procesos de selección en grupo donde les hacían “juegos y terapias” para decidir (o para cubrirse las espaldas y darle un nivel de inaccesibilidad a la empresa) quien era el candidato perfecto. Pero a la vez también ha tenido que seleccionar a gente para que trabaje junto a él en su puesto, por lo que ha podido ver las actitudes de la gente y lo que el saber popular ha hecho por estos individuos a la hora de reaccionar en las entrevistas.
Tengo que ir bien vestido. Pero, ¿qué es eso exactamente? Depende. Y me encantan los depende. Se debe ir acorde con el puesto que quieres ocupar. Traje, camisa, polo o camiseta. Depende.
Sin embargo, hay algo que sí que hay que tener muy en cuenta y estar al tanto en cuanto llegas a la entrevista. Es algo que no puedes prepararte de antemano, básicamente porque no sabes a lo que te vas a encontrar. Es el hecho de que el entrevistador sea de recursos humanos o sea un experto en el tema que estás tratando. Si se encuentra dentro del primer grupo, ten en cuenta que no le va a importar que uses tecnicismos o que sepas datos impresionantes, sólo se interesará por tus méritos y por tu presencia. Sin embargo, si el entrevistador es del segundo grupo, lo que verdaderamente querrá saber es hasta donde llega tu conocimiento sobre el tema o tu capacidad para desarrollarlo y aprenderlo. Este creo que es el punto clave de una entrevista.
Pero por supuesto y por encima de todo, tienes que llevar algo de ventaja y si eso es que ya sepan quien eres antes de entrar a que te pregunten, tienes mucho ganado con ello.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Mi vida, profesional


Soy Ricardo Zoe Álvarez Escalante. Nací el 9 de febrero de 1988 en la ciudad del Elche, Alicante.

Desde pequeño he tenido la conciencia de que tenía que llegar a trabajar en algo donde aprovechara mis ganas de saber, de solucionar cosas y  de pensar de manera distinta y rápida. Por eso cuando terminé el instituto decidí estudiar la licenciatura de Publicidad y RR.PP.

Actualmente estoy en 4º de esta carrera, pero en el proceso he podido desarrollar ciertas habilidades útiles para el mi futuro trabajo. He asistido y completado con eficacia dos cursos la fundación Coepa, de Diseño Web de 90h y de Retoque fotográfico con Photoshop de 90h

Tengo conocimientos avanzados sobre el dominio del paquete de Office de Microsoft, Word, Excel, Access, Power Point

Poseo un alto conocimiento sobre el uso del diseño gráfico por el uso de programas de Adobe como pueden ser Photoshop, Illustrator, InDesign, Dreamweaver, Acrobat reader, etc.

Puedo manejarme prácticamente con igual facilidad por los sistemas operativos actuales de Windows, Macintosh y Linux.

Estoy familiarizado con el uso de las redes sociales como Facebook, Twitter, Myspace, Tuenti, Blogger, Youtube, etc…

Además, puedo comunicarme en español y catalán (de este último con certificado de Grau mitjà) dado que son mis dos lenguas maternas. Además poseo conocimientos de inglés orales y escritos de nivel Intermediate.
Mi experiencia profesional, a pesar de no estar relacionada directamente con el mundo de la publicidad, si lo está con el contacto cercano con la gente, puesto que estuve trabajado de profesor colaborador de ofimática en la academia Redolí de la ciudad de Elche, e incluso vendiendo cursos de verano desde el mismo establecimiento. Otros datos de interés es que se trabajar dirigiendo gente como demuestra mis dos años de monitor deportivo para niños en la escuela de baloncesto Baby Basket de Elche. Esto último se puede complementar con el hecho de que soy directivo de un Club de baloncesto de mi ciudad, con lo que tengo un gran control sobre la importancia del trabajo duro.

Como complemento a mi formación, decir que tengo el permiso de conducir B1, vehículo propio y disponibilidad para viajar si lo requiriera el puesto.

Aqui dejo mi Power Point para informar y alegrar un poco. ¡Que os aproveche!

jueves, 4 de noviembre de 2010

No, creo que no quiero ser teleoperador

Una búsqueda concreta en los portales de empleo provoca en mí un increíble estado de sopor antinatural.  La interminable lista de empleos absurdos y mal pagados me crea una desazón que hace que plantee muchas cosas antes de seguir. Sólo buscando palabras al azar como publicidad, creatividad, diseño, comunicación, etc., surgen una cantidad de supuestas ofertas de las que menos de un 5% es aprovechable. Requisitos mínimos como “Español e inglés alto y portugués, francés, o alemán nativo” hacen que me ría de una manera casi peligrosa para mi salud.

He estado navegando por diferentes buscadores como Infojobs, Infoempleo, trabajar.com, primerempleo, laboris, redtrabaja o monster y en todos ellos lo he pasado en grande haciendo scroll pasando de las malas ofertas a las peores.  Nada se acerca ni lo más mínimo a lo que se podría considerar un trabajo publicitario. Escondidos detrás de unos tags  claramente manipulados para ser mejor encontrados, podemos toparnos con ofertas de comercial, azafatas o repartidores de buzoneo si intentamos identificar algo parecido a la publicidad. Si por el contrario osamos usar la palabra clave “creatividad” saldrá una lista de ofertas “utilísimas” de pastelero, economista o peluquero. Sí, es lo que tienen los buscadores, que en muchos casos son absurdos. Prefiero no comentar el esclavismo con el que se usa a los diseñadores gráficos, puesto que se les paga por trabajos realizados a precio de coste o con ofertas en las que el rango del salario puede rondar entre los 600 euros y los 1800 (¡En la misma oferta!).
Sin embargo el que más me ha dado que pensar es el tag de “Marketing”. Con alguna excepción de algún empleo de control de imagen corporativa de alguna empresa en expansión y cuyos requisitos es saber más que el editor de la Espasa-Calpe, todos las supuestas ofertas con ese nombre ofrecían una cantidad infinita de servicios de teleoperador. Creo que no, esa no es mi perspectiva de un buen futuro laboral. Sobre todo teniendo en cuenta la cantidad de veces que he maldecido ese trabajo a mediodía.
¿Qué puedo hacer para cambiar esto? Si quisiera encontrar un trabajo digno y que me eligieran a la primera entrevista de alguna e las empresas que aquí se anuncian, debería al menos saber un idioma más, aparte de perfeccionar mi inglés. En alguno de los casos el aprendizaje de ese idioma depende incluso de mi nacimiento en el país de origen, pero creo que ya es un poco tarde para eso. Por otra parte, podría completar mi formación de diseño gráfico aprendiendo a usar de manera profesional todos y cada uno de los programas de Adobe, aunque no se porque me da la sensación de que la mayoría de ellos solo los necesitaría para el currículum puesto para algunos se contrata directamente a programadores.
Sin embargo el requisito indispensable en casi todos los casos es la experiencia. Aquí entramos en un bucle difícil de salir mediante las ofertas de trabajo. Existe la posibilidad de mentir en el currículum para regular la balanza de la justicia de manera más equilibrada.
Pero todos estos problemas se minimizan si se busca en las dos grandes ciudades españolas, Madrid y Barcelona. Allí, donde se hacen los negocios y surgen las grandes ideas es donde está el gran mercado con el que empezar. La necesidad de dejar tu pueblo o ciudad atrás es casi obligatoria en este campo. Es un trayecto que debemos recorrer solos y mirando siempre hacia arriba, aunque sin dejar de perder lo que nosotros somos por el camino.
Por todo ello, aunque los buscadores son una gran herramienta, si se quiere impactar en el mundo de la publicidad, ser un dato más, un número de candidato para una entrevista, no sirve. Se debe impactar y se debe tener una buena carta de presentación, algo que acredite que no sólo eres bueno sino que te mueves para demostrarlo. Y estoy en ello.

jueves, 28 de octubre de 2010

Buscando faros

Uno nunca sabe como va a terminar la carrera que empieza. Ocurren imprevistos que hacen que varíen el camino, a pesar de que se tenga clara cual es la meta. Por ello cuando todo se nubla y vemos la inmensidad del océano que es la búsqueda de trabajo, tenemos que tener unos faros que nos sirvan de referencia para saber hacia donde dirigirnos.

Mi caso es muy complejo, pues la mayoría de estudiantes de publicidad sueñan con ser creativos de agencia, mentes pensantes que lleven adelante campañas con chispazos momentáneos.  Sin embargo, fuera del mundo de la publicidad, son escasos los creativos que tienen un nombre y a los que es fácil seguir. Mis referencias son por lo tanto personas que han conseguido mover un poco este mundo o que han llegado al “top” de la creatividad aún siendo “jóvenes”.

Mi primer caso es Álvar Suñol, Director General Creativo de Bassat Ogilvy Madrid,  actualmente nuevo miembro del Comité Ejecutivo del Grupo Bassat Ogilvy. Es un caso de un joven talentoso que ha estudiado en universidades de todo el mundo y ha viajado para tener una carga cultural y de conocimientos globales que le han hecho estar a cargo de la creatividad de la filial española de esta gran compañía multinacional.

Por otra parte quiero hablar de César García,  presidente y director creativo de la agencia Bob en Madrid. Ha llegado a ser  director creativo de Contrapunto y Young&Rubicam y ha sido máximo responsable creativo de Saatchi&Saatchi España y J. WalterThompson Madrid. Sin embargo quiso apartarse de esas agencias para montar lo que él considera “la primera agencia de nueva publicidad” en España. Lo que me gusta de este caso es que es alguien que ha cambiado su vida siendo valiente para llevar adelante una idea y ha podido cambiar su forma de pensar y de plantearse su trabajo. Ello escrito en su libro Bob.


Por último, mi ejemplo de líder creativo preferido es Toni Segarra. Alguien que tiene una forma distinta de mirar las cosas. Ha conseguido premios por todo el mundo en su agencia  *S, C, P, F,… Pasó por diversas agencias, entre ellas Contrapunto (como no) y después de estar en la multinacional Delvico Bates donde consiguió 85 premios en un año, decidió crear su propia agencia. A él se le deben campañas como la de “¿Te gusta conducir?”, “Be water my friend” o “Esto solo lo arreglamos entre todos”. En definitiva es un creativo que se mueve por ideas y que las valora, sabiendo diferenciar lo impactante de lo tradicional.

Para poder seguir la estela de cualquiera de estos genios, es necesario tener ciertas aptitudes innatas, pero también saber compatibilizarlas con estudios y vivencias. Mi principal carencia es un nivel de idiomas suficientemente alto como para poder discutir de fútbol, de política y de coches en un mismo día. Necesito poder hablar con gente de otros países y no tener el miedo del cateto español. Pero ese no es el único requisito. Todos los creativos empiezan con algún chispazo que demuestra su talento. Me falta esa carta de presentación. Yo no puedo estudiar en grandes universidades privadas que ensalcen mi currículum de manera casi mafiosa, por tanto lo que debo hacer es dar el disparo certero en el momento adecuado. Debo tener una gran carta de presentación que impacte y ese es mi gran reto para completar mi formación. Creo que es así, pues datos tiene todo el mundo, pero datos que emocionen no.


Y esta es una noticia que he visto hace poco y que me ha encendido una bombilla.


adoftheword.com

jueves, 21 de octubre de 2010

Busca, busca, que yo te encuentro


Google, el nuevo juez de Internet. Había un tiempo en el que se decía “hasta que no sales en… no existes”. Ahora tu reputación está directamente relacionada con lo que Google dice de ti. Y no es que debas tener más búsquedas que ningún otro, sino que lo que se diga de ti sea bueno. ¿Pero qué es ser bueno? Depende el caso.

Recuerdo un caso que nos presentaron de un futuro creativo que para llamar la atención de los grandes jefes de las agencias, puso su propio nombre junto al de los directores en páginas web creadas por él mismo. Esto dio a que por el aburrimiento (y el egocentrismo) de los grandes creativos de buscar cuantos resultados tenían de sus propios nombres, encontraron con un supuesto anuncio de un joven estudiante que demandaba una entrevista con ellos. Eso no quiere decir que pudiera conseguir el puesto, pero sí un chispazo en la mente de sus posibles jefes que le dieron la oportunidad. El resultado final es otra cosa.
En definitiva, lo que Google dice de ti sirva casi en exclusiva para descartar. Nadie quiere contratar a alguien cuyos primeros resultados en el “gran buscador” sean fotos de Facebook estando de borrachera. Mi caso por suerte no es eso.
Yo parezco un dependiente del estado, ya que la mayoría de mis resultados de la búsqueda de mi nombre son listas interminables de becas u otros pasos burocráticos similares. También destacan en primer lugar varios de mis blogs usados en diferentes clases, cosa que me da cierto margen a la hora de saber adaptar mi perfil en la red.
Sólo con un poco de iniciativa puedo adaptar las palabras claves y formar una serie de páginas web que redireccionen e mi perfil profesional. Me gustaría aparecer como alguien proactivo y que tiene sus momentos de ocio, pero que no le impiden ser útil en su trabajo. Por ello quiero luchar para ser creativo y dar una imagen no demasiado rígida para el ojo del Gran Hermano moderno, Google.

miércoles, 6 de octubre de 2010

¿Y tú quién eres?

Pongámonos en situación. Un joven, de esos que se encuentra entre el 40% de paro por haber nacido posterior a grandes guerras o dictaduras, se sienta con su mejor traje, el que le han dicho sus padres que le dará confianza, delante de una gran mesa de diseño. Detrás de ésta un fumador de puros empedernido mira con desprecio esos folios que resumen los logros y aptitudes de tu corta pero esperanzadora vida.
Cinco minutos más tarde está saliendo de esa inmensa estancia traspasando la barrera de humo que impregna tu traje. Ya sabe que tendrá que ir a la tintorería si no quiere que le confundan con una hoguera en movimiento.
Pero seamos sinceros, nunca nos entrevistaría el fumador. Cuando el joven está en un pasillo con la legión de trajeados compañeros de demandantes de empleo que te miran con cara de “voy a rebajarme tanto que jamás sabrás qué es lo que significa trabajar aquí”, le abrirá la puerta del despacho de entrevistas algún joven de recursos humanos que como él, pasó exactamente lo mismo hace unos meses pero con una diferencia clave;  ya está dentro. Eso le convierte en parte del sistema y por lo tanto su empatía hacia el entrevistado es la misma que podría tener hacía el bolígrafo de empresa con el que tacha tu nombre de la lista.
Cuando el joven vuelve a casa y ven su cara de “me han dicho que me llamarán pero sé que no es así”, su familia le consuela con “bueno, ya tendrás más suerte la próxima vez”. Suerte. Estudios superiores, master, dominio de idiomas, de herramientas de informática, de diseño, un nivel cultural superior a la media nacional y predisposición a ser pisoteado con el fin de poder trabajar. Sin embargo lo necesario es suerte.
Éste no es mi caso (todavía), pero sé que tengo muchas probabilidades de que lo sea. Es evolución natural. El hombre nace, crece, estudia más que todas las generaciones anteriores juntas, pero no está lo suficientemente preparado. El dictamen de pantocrátor del empresario de mediana edad casi sin estudios pero con un ego mayor que la longitud de su cinturón, choca contra nuestras aspiraciones laborales. 
Ahora es cuando debería dar una solución al problema. Soltar con confianza la lección aprendida y cambiar mi destino con palabras rimbombantes. Pero no creo que sirva de mucho decir “confía en tu esfuerzo, innova, se creativo, adáptate a lo que te venga, adelántate a los cambios, supérate a ti mismo…”. Y no lo creo por la sencilla razón de que esos problemas seguirán estando ahí. Problemas estructurales creados por aquellos a quienes más les beneficia. Yo no soy un posible empleado, soy un nombre. No soy innovador, soy un traje. Y sobre todo no soy un experto, soy un desconocido.  Mira, puede que al final si que haya podido sacar una conclusión. Búscate tus propios enchufes, sé el novio, el sobrino, el amigo o el compañero de sauna, pero no seas nadie o te acabarán preguntándote cuando te arrastres por un empleo “¿y tú quién eres?”.


jueves, 30 de septiembre de 2010

Huelga decir...

Me encantan los tópicos informativos, son la pieza esencial de todo mal periodista. En el caso de las huelgas me pirraba por oír frases como “baile de cifras”, “carga policial contra los manifestantes” o “movilizaciones con intención de desestabilizar al gobierno”. Sin embargo en el caso de la Huelga General del 29S me he quedado con las ganas de escuchar esas sentencias. Y eso ha sido porque esta huelga ha resultado ser bastante peculiar.
Para empezar se convocó una movilización generalizada en todo el país hace ya varios meses, dándole un amplio margen al Gobierno de España a reaccionar y poder cambiar con las exigencias sindicales. Ante la negativa de cambio de la reforma laboral, seguramente para que no se le vuelva a achacar al gobierno de cambios de rumbos rápidos de nuevo por parte de la derecha, ha habido tiempo a que los líderes de los grandes sindicatos UGT y CC.OO.
  pudieran hacer una gira para levantar a las masas como si de Bisbal se tratara. Y con ello no es que esté en contra de las giras informativas, aunque sí de seguir a Bisbal.
Pero, ¿cuál es la razón de tal movilización, aunque anunciada y de buena fe para no cabrear en exceso al gobierno socialista? En mayor medida la reforma laboral. Con los grandes países mandones de la Unión Europea dictando las actuaciones de nuestro gobierno desde Bruselas, el Presidente Zapatero ha accedido a crear una reforma laboral que no alegra unos por parecerles injusta para los trabajadores ni a otros por parecerles insuficiente para los empresarios. Ha sido lo que se dice, llegar por el camino rápido. ¿Y los sindicatos hacen bien arengando a las masas al parada general? Más que hacer bien, es lo que debían hacer. Si no gritan y agitan los brazos en casos como este, ¿a quién se quejarían los trabajadores de las injusticias que les pasan a diario? Unos trabajadores que tiene que ver como corren riesgo sus puestos de trabajo si la empresa puede prever pérdidas. Unos trabajadores que tendrán 15 días menos de sueldo por año trabajado que con el anterior convenio. Y sobre todo, unos trabajadores que ven peligrar unos principios básicos del estado del bienestar al congelarse el dinero de las pensiones y pensar en alargar la edad de jubilación hasta los 67 años.
Todo ello porque se piensa que es mejor recortar en gastos sociales que incrementar la palabra prohibida, los impuestos. Si miramos las tasas impositivas de otros países europeos veremos que España tiene la mitad de recaudación relativa. Eso quiere decir que aquí los más ricos tienen menos que declarar que en estados vecinos. Sin embargo la patronal no está contenta del todo. Ellos quieren el modelo americano, donde según ellos (parafraseando) “los trabajadores espabilan a la hora de encontrar trabajo si no tienen remuneración en el despido”. Ole. Es implica que si los empresarios, con Díaz Ferrán a la cabeza (no olvidemos el caso Marsans) consigue lo que pretende los ahora jóvenes estudiantes tendremos cada vez más difícil encontrar un trabajo estable. ¡Qué digo estable! ¡Digno!
El mileurismo es una utopía. El recién licenciado y demandante de empleo español tendrá que soportar despidos continuos porque “es posible que la empresa no de los beneficios esperados”. De este modo, la huelga me parece muy débil por las demandas y el carácter de reproche de preescolar, y si debería recortarse algo no deben ser los derechos los trabajadores, sino más bien el derecho a enriquecerse a costa de todo de los empresarios.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

El baúl actual


Cuando se empieza a hablar de remonte de la economía del país se habla de los cifras porcentuales de ventas en algún tema en concreto o de el precio del dinero, pero en ningún momento se habla de nuevas opciones para los parados. En los artículos comentados se habla del inicio de la crisis (con las previsiones y los temores), de los momentos más duros (los despidos y recortes en inversión en el sector de la comunicación)  y de la actual posición de amplio paro para los jóvenes españoles.
Si se miran los datos y se escuchan las valoraciones de gente como Strauss-Kahn se puede llegar a pensar que los jóvenes españoles no están dispuestos a tomar el relevo ocupacional como  el resto de los jóvenes europeos. Sin embargo nadie se ha propuesto abarcar un cambio social que favorezca el empleo aun a riesgo del empresario. 

Los cambios propuestos en la nueva reforma laboral solo han hecho que crispar aun más los nervios de unos trabajadores subyugados a las grandes empresas. Las amenazas de los empresarios han dado pie al hincamiento de rodillas por parte del gobierno, con la oposición pinchando aun siguiendo medidas basicamente de la derecha.
Pero, ¿cómo pueden la juventud trabajar en este mar tan revuelto? Sencillo, haciéndose notar. Cada generación tienes sus aptitudes innatas para cada cosa. Igual que los mayores de 35 años que han perdidos sus empleos tienen unas ganas en encontrar el trabajo que sea cueste lo que cueste, los menores de 35 han vivido al amparo de unos padres trabajadores durante sus primeros años. Sin embargo, estos últimos tienen capacidades de comunicación y de manejo de medios en internet que no tienen sus padres. Esa es la gran veta que tienen que explotar los jóvenes.
Cada uno, con sus estudios particulares ya sean de modisto o de arquitecto, puede compaginar esos saberes con la comunicación y venta de unos servicios únicos, los que realiza su persona. Nuestra generación debe ser la de autoventa. Chicos y chicas que pueden venderse si se lo proponen porque están preparados para el sistema laboral y que sólo los empresarios pueden detener. 

Abriendo el baúl

Hola a todos!

Sed todos bienvenidos al blog sobre empleo y el mercado de trabajo.
Por aquí veremos cosas que se me ocurran sobre el importante tema del empleo.